Fernando Ramírez Ruiz |
Fernando Ramírez Ruiz, nuevo Director de Recursos Humanos de Navantia, visitó en la mañana de ayer la factoría de San Fernando en su gira por los centros de la compañía. A las doce inició una reunión con el Comité de Empresa que se prolongó durante dos horas, a lo largo de las cuales tuvimos ocasión de brindarle nuestra opinión sobre la situación que atraviesa la empresa, tanto global como localmente, así como de plantearle nuestras alternativas y demandas.
Ramírez, nos presentó su trayectoria profesional en Airbus, donde entró como aprendiz con 14 años cuando aún era Construcciones Aeronáuticas, compatibilizando sus estudios en Ingeniería Informática y Derecho con el trabajo que ha llevado a cabo en distintas áreas, con creciente grado de responsabilidad, hasta llegar a la jefatura de Recursos Humanos donde negoció con éxito la firma de un convenio único para toda la empresa.
En relación con Navantia se abstuvo de aventurar ni prometer nada, como tampoco arrojó luz sobre los conflictos en curso. Se ha mostrado conocedor de la situación complicada por la que atraviesa la empresa así como confiado en una solución satisfactoria. Se ha mostrado sorprendido de la relevancia que tiene Navantia en el mundo de la construcción Naval, el potencial de la Bahía de Cádiz y la repercusión que tienen los centros en la comarca. El único adelanto que hizo sobre su labor al frente de Recursos Humanos ha ido referida al modelo de funcionamiento, que no concuerda con lo que tiene en mente, y para ello ha puesto a funcionar a su equipo con la idea de implantar un nuevo modelo más acorde con lo que Navantia necesita y para lo que considera necesaria la colaboración de la parte social, cuya labor ha encomiado por lo complicado y comprometida que resulta. Afirma tener un talante conciliador y dialogante que ha puesto de manifiesto durante su trayectoria en Airbus.
Por nuestra parte, desde CCOO, hemos intentado trasladarle nuestra visión de la situación, nuestras inquietudes y las posibles alternativas para la proyección futura de la compañía y la devolución de Navantia al lugar que le corresponde.
Como reto fundamental le planteamos la necesidad de carga de trabajo que debe ser el sustento para el Plan Industrial. Una carga de trabajo que no puede seguir dependiendo exclusivamente de las corbetas de Arabia y que debe empezar a orientarse de un modo firme a la segunda serie BAM, con la posibilidad incluso de participar en las F110 o en los AOR, recurriendo, si es necesario, al reparto de trabajo entre centros que siempre hemos defendido.
Hemos puesto de manifiesto la necesidad de abordar ya el Plan Industrial, sobre la base de una carga de trabajo suficiente y con la premisa del mantenimiento de todos los centros. Un plan que debe primar el aumento de la plantilla con la incorporación de jóvenes, de un modo objetivo considerando las capacidades y necesidades reales de cada centro, sin olvidar que el de San Fernando cuenta con tres líneas de negocio bien diferenciadas. Un plan que debe promover un reajuste en las plantillas, equilibrando gremios y manteniendo la capacidad operativa de modo que se evite la excesiva dependencia de la industria auxiliar y nos permita mantener el control de programas e instalaciones. Equilibrio que debe prevalecer en los procesos de nuevas incorporaciones, recordando sobre este particular que mientras la mayor parte de las bajas producidas lo han sido de personal de convenio, los 35 contratados en San Fernando por la tasa de reposición han sido técnicos superiores.
Convencidos de que el tiempo corre en nuestra contra y la negociación de este Plan debe comenzar ya, hemos reiterado una vez más que antes es preciso saldar las deudas pendientes y poner el contador a cero. La devolución de la parte de la DPO sustraída a los técnicos superiores, es una prueba de que con voluntad todo es posible. Restitución que, sin dejar de alegrarnos enormemente, constituye un lamentable agravio comparativo entre colectivos ya que el abono de las asimilaciones está sujeto a los mismos condicionantes y su importe debe estar aprovisionado una vez dejado de percibir el concepto que lo sustituyó en el IV convenio, la garantía de percepciones.
En relación más directa con los Recursos Humanos, le planteamos la necesidad del restablecimiento del diálogo social bloqueado durante los últimos años. En este sentido, al igual que planteamos al Presidente, le solicitamos que diese margen de maniobra a las jefaturas de personal en los centros para la resolución de cuestiones domésticas que en la actualidad se ven bloqueadas y obstaculizadas incomprensiblemente y sometidas a un proceso de burocratización, centralización e incluso judicialización del todo punto inadmisible.
Por su parte, el compañero Pepe Casas dio un repaso al ejemplar tratamiento de la Prevención en la factoría, resultado del compromiso e implicación de trabajadores y trabajadoras, Comité, mandos y direcciones, poniendo ejemplos significativos como la construcción del BAM, la Prevención Integrada, la renovación del Distintivo de Calidad Ambiental de la Junta de Andalucía, los trabajos en la Base de Rota, cultura preventiva y ambiental que se está haciendo extensiva a la industria auxiliar fundamentalmente por el ejemplo que supone la actuación de la plantilla propia.
No obstante alertó sobre la necesidad de mantener la exigencia y el compromiso de mejora sin bajar la guardia. Planteó la necesidad de un nivel de formación constante, tanto a la plantilla como a los mandos e incluso a los nuevos ingresos a fin de mantener el nivel de Salud Laboral, Prevención y medio ambiente de que disfrutamos. También se hace necesario avanzar un paso más con la Industria Auxiliar poniendo en marcha auditorías y controles sobre los niveles preventivos incluso antes de la contratación. En su intervención dio especial relevancia a la necesidad urgente de nuestra adaptación a la norma ISO 14.001/2015.
Finalizó su exposición planteando la reversión a los trabajadores y trabajadoras del importe de bonificación de comedores que, en la actualidad se dedica para temas preventivos, propuesta que CC.OO. viene planteando desde hace tiempo, considerando que los motivos por lo que se acordó la actual distribución han dejado de tener vigencia y debe ser la empresa la que se haga cargo de todos los costes preventivos, por lo que este importe debería repartirse entre toda la plantilla.
Finalizada las intervenciones, Fernando Ramírez dio por concluida la reunión dando algunas explicaciones y opiniones generales sobre lo expuesto sin entrar en detalle considerando que aún no domina todos los temas planteados y por prudencia prefiere madurarlos y contrastarlos con las aportaciones de todos los centros para lo que, de San Fernando, se lleva tres folios de anotaciones.