Ha pasado el tiempo de las promesas y queremos hechos

Toda profecía esconde una mentira, cuando menos una falsedad, desde los tiempos de Oráculo de Delfos hasta Rappel o la Bruja Lola, y aún sabiéndolo, cuando la desesperación nos atenaza somos proclives a creernos cualquier patraña que nos de un atisbo de esperanza.

Traemos esto a cuento a raíz de las numerosas consultas que algunos compañeros y compañeras nos hacen sobre los rumores que, como serpientes veraniegas, circulan en los mentideros de la factoría. "En junio se pagarán los atrasos". "Los que tengan a partir de 60 años se irán en vacaciones y no volverán". "Los técnicos superiores cobrarán sus DPO antes de las vacaciones". "La semana que viene se aplica el convenio y comenzarán las negociaciones del plan". "Las corbetas se firman antes de julio...."

Es lo que llaman posverdad, en la que los hechos objetivos tienen menos influencia que las apelaciones a las emociones. El debate se enmarca en apelaciones a emociones desconectándose de los detalles y en la reiterada afirmación de puntos de discusión en los cuales los hechos son ignorados. Se resume como la idea en “el que algo aparente ser verdad es más importante que la propia verdad”.

Ya nos gustaría que todo fuese verdad, que el futuro pintara de rosa y salir de este impasse incierto, pero los hechos nos imponen la cruda realidad.

Hechos: la presidenta de SEPI anunció que pasada la Semana Santa se inicarían las negociaciones del plan industrial y atendería la petición de los sindicatos de solucionar el convenio y el conflicto de los técnicos superiores. Estamos en junio y aún seguimos igual.

Hechos: el nuevo presidente de Navantia, Esteban García, estableció el 31 de mayo como fecha tope para presentar la nueva estructura organizativa de Navantia. Estamos a 2 de junio y aún nada.

Hechos: en su comparecencia ante la Comisión de Presupuestos del Congreso, la presidenta de SEPI habla de "salidas naturales" para Navantia, lo que remató un alto directivo de Navantia días pasados, con motivo de la reunión de la Coordinadora Unitaria de Comités de Empresa (aún no reconocida como interlocutor por parte de la dirección) cuando afirmó que "este año no saldrá nadie de la empresa".

Hechos: aprobados los Presupuestos Generales del Estado por el Congreso, y pendientes sólo de la ratificación por el Senado, se mantienen las limitaciones que, presuntamente, limitan la aplicación del III Convenio de Navantia y la reposición de plantilla.

Hechos: durante la tramitación de los Presupuestos se han presentado enmiendas a los mismos que afectan a Navantia por parte del Grupo Socialista y el Grupo formado por Unidos Podemos, En Comú Poden y Em Marea.

Este último nos da la de cal y la de arena. Por un lado piden incluir 15 millones de euros para el plan de inversiones del sector naval en la Bahía de Cádiz (enmienda nº4.741) y por otro piden la reducción del presupuesto del Ministerio de Defensa y el incremento de las penalizaciones por retrasos, citando como ejemplo al BAM, que ya podrían haber cogido otro ejemplo más sangrante para la economía de la compañía, que haberlos haylos (enmienda nº3.006).

En cualquier caso, en Unidos Podemos, En Comú Podem y Em Marea, hemos de reconocer, al menos, coherencia entre su discurso y sus acciones en este asunto, por más que estemos en desacuerdo. Más nos indigna la actitud del PSOE, que siendo el partido que gobierna Andalucía y nuestra ciudad, ha presentado enmiendas destinadas a la mejora de las instalaciones y perspectivas de los centros de Navantia en Ferrol y Cartagena, dejándonos en el más detestable de los olvidos.

En su enmienda nº 889 solicitan 10 millones de euros para la modernización de las instalaciones de Ferrol. En la nº 890, 15 millones de euros para impulsar los trabajos en Cartagena. En la nº2392, 140 millones para modernizar las instalaciones de Navantia - Ferrol incluyendo la construcción de un dique cubierto. En esta última se argumenta "La modernización de las instalaciones de Navantia - Ferrol y la construcción de un dique cubierto debe ser contemplada como cuestión de Estado. Este proyecto valorado en 140 millones de euros es imprescindible acometerlo con urgencia en una comarca con un alto porcentaje de paro y dentro de un programa de reindustrialización de la comarca de Ferrolterra que debe ser referente en la construcción naval."

Esto por parte de un Grupo Parlamentario Socialista, de cuyos 84 diputados, 20 (la cuarta parte) son andaluces, frente a los 6 gallegos o los 2 cartageneros con que cuenta, y entre los que se encuentran 3 gaditanos. ¿Significa esto que el PSOE da por perdida la construcción naval en la Bahía de Cádiz?. Mientras tanto Irene García, la presidenta de Diputación, se ha acercado a Oslo, a la feria bienal Norshipping a apoyar, presuntamente, la labor comercial de Navantia... ¿Ferrol?¿Cartagena?.

En definitiva, podríamos elucubrar, aventurar, confiar, pero lo que nos dicen los hechos es que nada ha cambiado, que seguimos prácticamente estancados en todos los sentidos y que sólo dependemos de nosotros mismos y nuestra determinación. Mañana, en julio, en septiembre... pueden pasar muchas cosas, pero hoy, lo que hay es lo que hay.