lunes, 9 de enero de 2017

Volver a empezar





Nos gustaría abrir este 2017 con alguna buena nueva, pero nada más llegar a las puertas de la factoría nos hemos encontrado a los compañeros vigilantes de Segur Ibérica aplicando con todo rigor las medidas de seguridad a la entrada, con las consiguientes retenciones, como medida de presión ante el impago de la nómina de diciembre por parte de su empresa.

Ya nos despedíamos del pasado año con la incertidumbre acerca de la situación de la compañía de seguridad y los malos presagios se han cumplido. Segur Ibérica ha entrado en concurso de acreedores y, como siempre, los paganos vuelven a ser los trabajadores.

Las movilizaciones continuarán durante toda la semana en los tres centros de Navantia en la Bahía a la espera de recuperar el salario adeudado y una solución definitiva al conflicto.